▷ 10 Remedios para eliminar la diarrea. Efectivos y caseros

La diarrea es un tipo común de malestar o infección gastrointestinal. Los síntomas habituales de la diarrea incluyen cólicos abdominales, deposiciones frecuentes y acuosas y distensión abdominal. Y es una señal de que el organismo intenta deshacerse de algo tóxico.

La diarrea aguda dura menos de dos semanas y puede ser provocada por una infección bacteriana, comida contaminada, intolerancia a la lactosa, infección viral, uso reciente de antibióticos o agua contaminada.

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Formas de controlar la diarrea en adultos

Hidratación. La deshidratación por diarrea puede ser fatal en adultos mayores y en niños pequeños. Debes tomar abundante agua, para recuperar todo el líquido que está perdiendo tu cuerpo. Las soluciones de hidratación pediátrica como Pedialyte, son muy recomendados para los niños con diarrea. Los adultos, por su parte, pueden beber soluciones de rehidratación o bebidas deportivas. Trata de consumir entre 2 y 3 litros de líquidos claros como agua, caldo o jugo de frutas para mantenerte hidratado. Los líquidos prohibidos durante estos momentos son la leche, bebidas carbonatadas, café, alcohol o refrescos.

Probióticos. Son fuentes de bacterias buenas o microorganismos vivos que existen en ciertos alimentos y que ayudan a la flora intestinal, a restaurar el equilibrio de las bacterias en el intestino y al correcto funcionamiento del sistema gastrointestinal. Come productos como yogur, queso cottage, chocolate negro, pan de masa fermentada y quesos blandos añejos.

Alimentos para comer. Ingerir algunos productos puede servir para calmar cierta sintomatología. Los bajos en fibra servirán para reafirmar las heces. Come arroz blanco, plátanos, papas hervidas u horneadas, harina de avena, sopa de pollo, pollo al horno sin piel. Consume alimentos blandos mientras te recuperas.

Alimentos a evitar. Frijoles, alimentos grasosos o picantes, brócoli, café, coliflor, repollo, edulcorantes artificiales, garbanzos, leche.

Descanso. Permite al cuerpo recuperarse, intentando bajar los niveles de estrés, durmiendo lo suficiente y evitando realizar ejercicios o actividades físicas demandantes.

Evita el alcohol y el cigarrillo. Puedes irritar más el estómago aumentando el malestar.

Evita acostarte. O acuéstate con la cabeza sobre almohadas que den un ángulo de 30 grados. Ya que al estar horizontal el ácido del estómago puede desplazarse y causar acidez estomacal.

Remedio casero para la diarrea rápido

Jugo de manzana y el caldo transparente. Te brindarán las sales y los minerales perdidos por la diarrea. Evita los cítricos, ya que sus ácidos pueden irritar los intestinos inflamados.

Té fresco de cáscara de naranja. Te permitirá estimular la digestión. Pon a hervir una taza de agua con las cáscaras de la naranja, luego debes colar, endulza con miel y bebe. Debes tener presente si la naranja es orgánica, ya que la piel podría tener restos de colorantes y pesticidas.

Compota de manzana. Contiene pectina, que ayuda a reafirmar los movimientos intestinales. Come solo o unta a una rebanada de pan tostado.

Jugo de Aloe Vera. Sana el revestimiento del sistema digestivo, fomenta la eliminación de toxinas y reduce el exceso de ácido estomacal. Toma media taza tres veces al día.

Arroz. Tiene un buen efecto en los intestinos, agrega volumen a las heces y alivia el dolor y los calambres. Come porciones pequeñas de arroz blanco, sin mantequilla.

Manzanilla. Este té combate la inflamación y alivia los espasmos intestinales, además de brindarte relajación.

Dieta BRAT. Plátanos, tostadas, arroz, compota de manzana y té, son alimentos que te ayudan contra la diarrea y te mantienen nutrido.

Miel. Mezcla una taza de agua caliente con 4 cucharadas de miel. Deja enfriar y bebe.

Agua con vinagre. El vinagre de manzana podría ayudar a combatir el problema, si se trata de una infección bacteriana, gracias a sus propiedades antibióticas.

Suero de leche. Presente en muchas culturas como uno de los remedios caseros contra la diarrea.Mezcla media cucharadita de jengibre seco en una taza de suero de leche y bébelo tres veces al día.

Fibra cruda de semillas de lino y chía. Puede ayudar a espesar las heces y reducir la frecuencia. Come 2 o 3 cucharadas diarias.

Menta. Puede reducir la inflamación intestinal y mejorar el tracto digestivo. Además de detener los calambres, frecuentes eliminaciones y dolores por sus propiedades antiespasmódicas. Para hacer un té hierve hojas de menta con cardamomo. También puedes agregarlo a otras bebidas o comidas. Los caramelos de menta te ayudarán a reducir el dolor y la incomodidad de la acidez estomacal.

Zanahorias. Son fuente de pectina. Cocina algunas zanahorias hasta que estén blandas, luego licúalas con un poco de agua, hasta formar un puré, come una taza cada dos horas.

Té negro. Contiene taninos astringentes que ayudan a reducir la inflamación intestinal.

Hierbabuena. Es uno de los mejores remedios caseros para la diarrea. Por mejorar infecciones gastrointestinales y los espasmos estomacales e intestinales. Puedes hacer un té con tres hojas de hierbabuena y una de agua. Igualmente puedes agregarla a comidas o a jugos.

Moras. También son ricas en taninos. Hierve una o dos cucharadas de moras o de hojas de mora secas por una taza y media de agua durante 10 minutos, luego cuela y bebe varias tazas durante el día.

Jengibre. Contiene sustancias químicas que aceleran las contracciones del estómago y mueven más rápidamente los alimentos que causan indigestión y el dolor en el estómago. También puede servir para reducir las náuseas, vómitos y diarrea. Puedes añadir jengibre a los alimentos o prepararte un té.

Regaliz. Ayuda a reducir la gastritis y la inflamación del revestimiento del estómago. Prepara un té con dos cucharadas de polvo de raíz de regaliz con agua hirviendo y toma la mezcla varias veces al día.

Canela. Permite reducir los gases, la hinchazón, los cólicos, facilitar la digestión, reducir el riesgo de irritación y el daño en el tracto digestivo por su alta composición en antioxidantes. Puedes tomar un té de canela dos o tres veces al día, o agregar una cucharadita de canela en polvo a tus comidas.

Baño caliente. Ayuda a aliviar los síntomas al relajar los músculos y aliviar la indigestión. También puedes aplicar una bolsa caliente en el estómago durante 20 minutos.

Jugo de limón con bicarbonato de sodio. Alivia las molestias digestivas. El ácido carbónico que se produce puede ayudar a reducir los gases, la indigestión y reducen la acidez en el estómago. Mezcla una cucharada de jugo de limón, una cucharadita de bicarbonato de sodio y un vaso con agua.

Milenrama. Sus flores contienen polifenoles, flavonoides, lactonas, resinas y taninos que ayudan a reducir la cantidad de ácido que produce el estómago y la indigestión. Puedes preparar un té con sus hojas secas o molidas. O agregar a ensaladas o comidas.

Clavos. Sus componentes ayudan a aumentar las secreciones gástricas, a reducir los gases en el estómago y acelerar la digestión lenta. También pueden ayudar a reducir las náuseas y los vómitos. Mezclar una cucharada de clavos en polvo con una cucharadita de miel y tómala antes de acostarse. Para hacer un té pon a hervir una taza de agua con cinco clavos, y bebe dos veces al día.

Agua de coco. Es útil para la rehidratación y por ello uno de los mejores remedios caseros para la diarrea. Tiene elevados niveles de magnesio y potasio, que ayudan a disminuir el dolor, los espasmos musculares y los calambres. Bebe 2 vasos de agua de coco cada 4 horas.

Comino. Reduce la inflamación intestinal, los gases y la indigestión, por sus componentes antimicrobianos. Agrega una cucharada de comino en polvo a las comidas. Igualmente puedes hacer un té con las semillas de comino.

Albahaca. La albahaca contiene ácido linoleico, que tiene propiedades antiinflamatorias, eugenol, que puede ayudar a reducir la cantidad de ácido en el estómago. También permiten reducir los gases, mejorar la digestión y aliviar los cólicos. Puedes hacer un té con hojas secas o frescas, o agregarlas a tu comida.

Bananas. Contienen potasio, ácido fólico y vitamina B6, que permiten aliviar los espasmos, calambres y dolores. También agregan volumen a las heces, aliviando la diarrea.

Yogur. Es uno de los mejores remedios caseros para la diarrea y los problemas estomacales, por su función prebiótica, y sus bacterias buenas, como Bifidobacterium y Lactobacillus acidophilus. Come dos yogures naturales al día, de esta manera eliminarás las bacterias perjudiciales y remitirán los síntomas de la diarrea.

Agua de arroz. Calma los calambres y el dolor estomacal, reduce la irritación y protege las mucosas corporales. Prepara el agua de arroz con una taza de arroz y cuatro de agua, cocina por 20 minutos, cuela y reserva el agua. Toma 3 tazas al día.

Ajos y azúcar morena. El ajo contiene alicina, que tiene propiedades fungicidas, depurativas, bactericidas y antisépticas, por lo que funciona contra diferentes virus y bacterias. Machacar dos dientes de ajo, agrega dos cucharaditas de azúcar morena, hierve en una taza de agua y bebe tres veces al día.

Semillas de fenogreco. Tiene mucílagos que poseen propiedades antidiarreicas, por lo que masticar un poco de fenogreco tostado durante el día te permitirá cortar la diarrea.

Causas más frecuente de diarrea en niños

Alergias a los alimentos o intolerancia a la lactosa.
Rotavirus, también conocido como gripe estomacal o gastroenteritis viral.
Consumir demasiado líquido o muy poco.
Durante la lactancia puede tener reacciones si la madre consume algo que es difícil de digerir.
Tomar antibióticos, que pueden causar cambios en la flora intestinal, por la eliminación de bacterias saludables.
Reacciones a la fórmula.
Infección bacteriana, provocada por tocar superficies sucias y luego llevarse las manos a la boca.

Precauciones con la diarrea

Por lo general, la diarrea se puede tratar y controlar de forma casera sin inconvenientes. Debe visitar la médico en caso de que los síntomas no mejoran, y tener mucho más cuidado si se trata de ancianos, bebés, niños o personas con alguna enfermedad que pueda empeorar, o si la diarrea se agrava con: sangre o mucosidad en las heces, fiebre, pérdida de peso involuntaria, vómitos o diarreas continuas o incontrolables, mareos o aturdimiento, bulto en el abdomen o estómago, dificultad para tragar, antecedentes de anemia o dolor al orinar.