Son más frecuentes desde la semana 6 hasta la 24. La anatomía de la mujer favorece la entrada de bacterias a la uretra y al resto del aparato urinario.
Una infección de vías urinarias en el embarazo puede ser dolorosa, con micción frecuente, ardor y otras sensaciones desagradables. Lo más importante para prevenirlas y combatirlas es con una excelente hidratación para eliminar las bacterias presentes en el área del aparato urinario.
Es importante que acudas a tu médico en caso de presentar los síntomas. Aunque muchas veces solo afectan la uretra y la vejiga, algunas conducen a una infección renal lo que podría acarrear un parto prematuro o bajo peso al nacer. Un tratamiento apropiado y temprano no permitirá que la infección cause daños al bebé.
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Causas de las infecciones urinarias en embarazadas
Son originadas generalmente por bacterias en el tracto urinario que incluyen riñones, vejiga, uretra y uréteres. Aunque cualquier persona puede tener una, las embarazadas son más susceptibles a este padecimiento, ya que las hormonas provocan alteraciones en la zona que incrementan las posibilidades de una infección.
Otra motivo de infección de vías urinarias en el embarazo, se produce por la presión que ejerce el útero en aumento sobre la vejiga, con lo cual se impide la expulsión total de la orina, y la que queda almacenada es una fuente para la infección.
Así mismo, gran parte de las embarazadas, sufren desde la semana seis de dilatación uretral, que es provocada cuando se expande la uretra. Y las hormonas y otros cambios pueden hacer que el organismo disminuya la capacidad para enfrentar a los microorganismos malos que entran. La progesterona además aumenta las secreciones vaginales que pueden causar infecciones.
También se ha observado en más del 70% de las embarazadas un aumento de la glucosa en la orina que provocan más infecciones del tracto urinario. Una de las principales infecciones bacterianas es la cistitis que es causada por la E.Coli o Escherichia Coli, que se encuentra en el tracto digestivo.
Síntomas de una infección urinaria en el embarazo
- Orina turbia y con olor.
- Necesidad de orinar más seguido.
- Sensación de ardor al estar orinando.
- Escozor o prurito.
- Calambres o ardor en la parte baja del abdomen o de la espalda.
- Problemas para orinar.
- Sensibilidad y dolor en la vejiga.
- Sentimiento de urgencia para orinar.
- Fiebre, escalofríos, incontinencia y sudores.
- Mucosidad o sangre en la orina.
- Dolor durante el acto sexual.
- Alteración en la cantidad de orina.
- Vómitos, fiebre, escalofríos, náuseas y dolor de espalda si ha llegado a los riñones.
Para diagnosticarte, un médico te indicará hacerte un examen de orina para ver lo valores de glóbulos blanco y rojos, y para hallar bacterias, también un cultivo de orina revelará la clase de bacteria a la que se enfrentan.
Tratamientos para una infección de la orina durante el embarazo
El médico recetará antibióticos para atacar la infección. Por lo general son tratamientos de tres a siete días. Deberás seguir las indicaciones correctamente. Los síntomas usualmente desaparecen antes de terminar de tomar las pastillas, pero no detengas la dosis si ves mejoría, ya que podría regresar con más fuerza o crear resistencia.
Dependiendo del tipo de bacterias a atacar te mandarán la dosis y antibióticos adecuados para la infección urinaria, los más comunes son la eritromicina, la penicilina y la amoxicilina que son seguros para el desarrollo del feto. Por el contrario, no enviarán algunos otros antibióticos que podrían causar daños como el trimetoprim, la ciprofloxacina, el sulfametoxazol o la tetraciclina.
Algunas veces las mujeres embarazadas no presentan síntomas, es por ello que es importante acudir al médico con regularidad durante los 9 meses y hacer los exámenes pertinentes indicados. Así podrás tener un tratamiento oportuno que garantice tu salud y la del bebé.
¿Cómo prevenir infecciones urinarias ?
- Usa ropa interior de algodón que no promueven la aparición de microorganismos.
- Limpia de adelante hacia atrás cuando estés en el baño. Ya que las bacterias son más frecuentes en el ano, por lo que un mal lavado puede arrastrar a la uretra microorganismos que podrían hacer daño.
- No orines en la ducha.
- Mantén limpia la zona genital.
- Orina antes y después de las relaciones sexuales, para expulsar los microbios que lograron entrar.
- Bebe ocho vasos de agua diarios. La hidratación es muy importante para expulsar con tiempo todas las bacterias presentes en el tracto urinario.
- Puedes lavar tus genitales con agua tibia antes de tener sexo, ayuda a mantener alejadas las bacterias de la uretra.
- Si usas lubricantes inclínate por los que son a base de agua.
- Elige la ducha en vez de la bañera, ya que la última favorece la presencia de bacterias.
- Prescinde de jabones, talcos, spray o desodorantes femeninos que causan irritación.
- No vistas pantalones muy ajustados que podrían retener bacterias cerca de la uretra.
- Bebe jugo de arándanos sin azúcar para hidratar.
- Evita el uso de un condón lubricado con espermicida o un diafragma, ya que ayudan al crecimiento de bacterias. Para esto deberás cambiar tus métodos anticonceptivos.
- Cámbiate de ropa interior cada día.
- Suprime la cafeína, el azúcar, productos refinados y el alcohol.
- Puedes ayudar a enfrentar la infección tomando betacaroteno, zinc y vitamina C.
- No aguantes las ganas de orinar, intenta vaciar la vejiga completamente y ve al baño en cuanto tengas la necesidad.
- Mientras te encuentras en tratamiento para una infección de vías urinarias en el embarazo, evita las relaciones sexuales.
Riesgos de una infección urinaria durante el embarazo
Las mujeres embarazadas más susceptibles son las que han tenido varios hijos seguidos en corto tiempos, las que han tenido una infección anterior, las primerizas y las de edad más avanzada. Así que deben estar más atentas para evitar tener una infección, por los peligros que acarrea tanto para la madre como para el bebé.
El riesgo más conocido y el mayor que existe es un parto prematuro. Que puede causar que el bebé no esté bien desarrollado y preparado para nacer. Lo que pone en peligro su vida.
También puede haber demora en el desarrollo intrauterino, infección del líquido amniótico, bajo peso al nacer y anemia.
En la madre puede provocar fiebres muy altas después del parto. Y algunas enfermedades por la propagación de bacterias en otras áreas que pueden causar un problema mayor, como extenderse a los riñones y causar un potencial daño permanente.
Los bebés también pueden nacer con padecimientos de salud por las bacterias no combatidas a tiempo. Es por esto que a algunos niños les administran antibióticos al nacer, si los médicos detectan los microorganismos y un peligro viable.
Por estas razones es sumamente importante llevar un control mensual del embarazo, realizar todos los exámenes mandados por el médico y tomar el tratamiento de la forma indicada para eliminar cualquier probabilidad de problemas a futuro.
Remedios caseros para infecciones urinarias
Además de la atención y el tratamiento médico cuando se presenta una infección de vías urinarias en el embarazo, existen algunos métodos caseros que te ayudarán a complementar los fármacos y a recuperarte más rápido. Es importante que consultes a tu médico antes de tomar algo adicional, así sea natural, esto te permitirá hacerlo con la mayor seguridad y responsabilidad.
La piña permite combatir una infección de vías urinarias en el embarazo ya que es un antibiótico natural al contener bromelina. Además reduce el dolor y desinflama. Puedes comer trozos de piña o preparar un jugo.
Come espárragos ya que son ventajosos al depurar el aparato urinario.
El ajo es un antibiótico natural y funciona para diferentes padecimientos. Puedes machacarlo, dejarlo reposar en un vaso de agua y beberlo. O comer un diente directamente por algunos días.
La cebolla ayuda a matar bacterias. Puedes hervir un poco en una taza de agua y beber.
El agua de coco permite eliminar las impurezas de los riñones.
Toma vitamina C o ingiere a través de la naranja o el limón, esto te permitirá mejorar tu sistema inmune para que ataque mejor las infecciones.
Puedes darte un baño de asiento con aceites esenciales como el hinojo, el eucalipto o la bergamota.
La calabaza permite desinflamar las vías urinarias.
Las infusiones de hinojo, alcachofa, y apio son diuréticas lo que te permitirá expulsar las bacterias.
El bicarbonato de sodio permite hacer la orina menos ácida, al ser alcalino regulariza el pH del cuerpo. La acidez hace que las bacterias se propaguen, por lo que es bueno reducirla. Puedes agregar una cucharada pequeña a un vaso de agua y tomar una vez al día por una semana.
La malva y la manzanilla en té tienen propiedades antiinflamatorias, antisépticas y depurativas. Puedes tomar durante el día varias tazas.
Los remedios de homeopatía como el berberis te ayudará con el dolor en los riñones y la cantharis que se usa para cuando hay dolor o sangre en la orina.
Jugo de arándanos para las infecciones urinarias
Tiene una propiedad astringente y antiséptica. Es rico en antioxidante. Es uno de los remedios naturales mayormente conocidos por su capacidad para combatir las infecciones urinarias.
Ingredientes
1 vaso de agua
250 gramos de arándanos
Preparación e indicación
Licúa los arándanos junto al agua. No coloques azúcar ya que esta promueve el crecimiento de bacterias.
Debes beber este líquido 3 veces al día, por el tiempo necesario.