La montaña no se escala sola: el deportista debe entrenar constantemente para ser el mejor. Sin embargo, es necesario conocer la teoría para poder sacarle provecho a su entrenamiento. Los siguientes consejos ayudarán a los atletas a optimizar sus sesiones de ejercicios para superar su nivel cada día.
Para llegar al máximo potencial en un deporte no solo se necesita esfuerzo y perseverancia. Es importante entrenar de manera inteligente, con métodos que permitan evaluar el progreso y que trabajen los músculos que más se necesitan desarrollar. Además, el uso de productos para deportistas también es ideal para optimizar los entrenamientos.
Al entrenar de forma sistematizada, siguiendo algunos consejos, se puede sacar el máximo provecho al ejercicio y mejorar enormemente el rendimiento en la actividad que se realice. De esta forma, los deportistas alcanzan su potencial ideal, dándolo todo y consiguiendo los mejores puestos en las competencias.
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El método RPE para monitorizar el entrenamiento
Durante los ejercicios de fuerza y resistencia que lleva a cabo un deportista se requiere llevar cuenta del progreso exacto, monitorizando las cargas y midiendo absolutamente todos los detalles para determinar el rendimiento que se tendrá durante las competencias.
Existen medidores como el índice de Esfuerzo Recibido (o RPE), el cual indica el esfuerzo e intensidad ejercida en un entrenamiento. Calcular esto permite monitorizar la sesión y llevar cuentas de cuánto esfuerzo se realiza en cada peso. Todo esto se mide desde el 0, que representa descanso, hasta el 10, que representa el esfuerzo máximo.
Se puede calcular el valor de una carga de entrenamiento con esta fórmula: carga (A.U.) = RPE x duración de la sesión (min). Si se agregan otros medidores, por ejemplo, el de la monotonía o el del training strain, se puede medir con fiabilidad y validez el esfuerzo realizado durante el entrenamiento.
Una rutina de ejercicios personalizada para el atleta
A la hora de entrenar es importante saber qué músculos requieren más prioridad. Claro está, todo esto depende de las capacidades físicas del deportista y de la disciplina en la que este participe. La resistencia, flexibilidad y fuerza de los músculos debe desarrollarse al máximo para que estos puedan funcionar adecuadamente durante las partidas, evitando la fatiga y cansancio.
Los flexores de cadera son unos de esos músculos que deben fortalecerse en varios deportes, Los psoas ilíaco, psoas mayor y psoas menor son músculos que permiten la flexión y rotación externa de la cadera, además de la flexión y el equilibro de la columna lumbar. Ejercicios específicos, como el estiramiento de rodilla en el suelo o las sentadillas, permite fortalecer esta articulación tan importante que es la cadera, pues es la que une el tren superior con el inferior.
Un entrenamiento, además de estar medido por métodos como el RPE, debe tener en cuenta los ejercicios específicos para cada tipo de músculo. Un entrenador profesional puede desarrollar una rutina de ejercicio personalizada para potenciar las debilidades del atleta y convertirlas en fortalezas, siempre teniendo en cuenta los requerimientos que tiene el deporte que practica.
El CBD y sus ventajas en los deportistas
A lo largo de toda su carrera, el deportista sufrirá lesiones al menos un par de veces. Los accidentes nunca avisan, y factores como la simple fatiga, por inflamaciones, o incluso fracturas, requieren un tratamiento lo más rápido posible, para así reducir los tiempos de recuperación y asegurar la pronta vuelta al campo de juego.
Una tendencia que ha llamado bastante la atención últimamente es la de los productos fabricados con CBD para deportistas. Y es que el componente cannabinoide que posee esta planta resulta muy beneficioso para la salud si se aplica de manera adecuada.
En el mundo del deporte es bastante común ver bálsamos y lociones recuperadoras basadas en CBD, con cualidades antiinflamatorias muy potentes. Este tipo de productos no son considerados sustancias dopantes por las instituciones deportivas, por lo que pueden ser utilizados, tanto por el deportista casual como por los atletas de más alto rango, sin ningún tipo de inconveniente.